lunes, 6 de junio de 2011

Lacoru te es así (13).



Nuestra amada villa cuenta con dos magníficas muestras anuales de cine "diferente": (S8) y "Ciencia e cinema". El CGAI y el Fórum Metropolitano ofrecen una suculenta programación cinematográfica durante todo el año. Además contamos con varias fundaciones y/o museos que nos nutren de exposiciones, ciclos, cursos, conferencias... Hay dos festivales de ópera además de otros programas de la Orquesta Sinfónica y también está el Festival Manicómicos. Acaban de traer a ¡DIAMANDA GALAS! para inaugurar el Ágora, ya podemos disfrutar de la Normal, nuestro futuro alcalde ya habla de abrir otro "contenedor cultural" más... y por fin se habla de convertir la antigua cárcel en otro centro cultural. Hay varias salas que programan conciertos con regularidad (Mardigras, Le Club, Garufa...) y Expocoruña monta también sus buenos tinglados: ¡tenemos un SONAR Coruña, por el amor de Bogo! 

Sin embargo éramos unas 50 personas en el Campus Rock de este año, el 981 ha desaparecido en combate, nos hemos quedado sin la sana contrapartida de la Casa das Atochas... ¿No se nos está yendo un mazo la pinza? 




Mientras tanto, al otro lado del espejo, un día después de la magna proyección de Metropolis en el Colón gracias al (S8) y un par de semanas antes del SONAR, el azar puso en mi camino dos eventos ultracoruñitas: miscelánea coral pre-teen en la Iglesia de San Nicolás y zarzuela y opereta en el Colón con sendos llenazos de un público entregado y una media de edad de 60 años (en serio). 

miércoles, 1 de junio de 2011

Fotomatonismos.


¡Tres nuevas contribuciones del azar a mi colección de fotos encontradas! Mi hermano encontró juntas las dos primeras y me las dio la semana pasada. La tercera la encontré hoy en Hacienda ante el control de seguridad.

Desde hace un par de años he notado que las fotos de carné escasean más por el suelo. Lo había achacado a la fotografía digital, la posibilidad de enviarlas por correo electrónico y demás moderneces pero que hayamos encontrado estas tres en pocos días significa que la colección sigue viva. Y me alegro.

También me he dado cuenta de que ahora me da más reparo compartirlas en la Red por aquello de la privacidad, el derecho a la intimidad, la protección de datos, etcétera... así que les he añadido la ridícula banda negra como símbolo de mi paranoia. Curiosamente, cuando compartí todas las demás ni siquiera me planteé hacer semejante cosa: aparté las fotos de niños y listo.